viernes, 18 de agosto de 2017

Imagen gráfica

Atentado en Barcelona y Cambrils (no lejos de Barcelona).
A poco, imágenes gráficas y escritas.
Comentarios sorprendidos o indignados por las filmaciones en vez de la aportación de ayuda, o la huida.
Avisos, poco después, de no divulgar por las redes sociales las imágenes por respeto de las víctimas y para no  acrecentar el miedo, por tanto, para no dar juego a los terroristas.
Imágenes gráficas.

¿Qué habríamos hecho, si hubiéramos estado en las Ramblas o el Paseo Marítimo de Cambrils? ¿Nos hubiéramos acercado a los malheridos, o hubiéramos filmado?

No lo sé. Quizá solo lo hubiéramos sabido si hubiéramos estado en los lugares luctuosos.

La condena ha afectado a las imágenes gráficas; no textuales. Esta tan distinta consideración implica un juicio muy distinto acerca de la relación entre la realidad y las imágenes gráficas y escritas. Las gráficas dan la sensación que muestran lo acontecido; las escritas, lo recrean. Las palabras y la gramática mantendría a distancia la realidad, o la evocaría simbólicamente. Negaríamos el carácter simbólico de las fotografías y las imágenes en movimiento. pero ambas son construcciones: se enfoca, se encuadra, se adopta un punto de vista, una altura "de miras"; la luz, las sombras intervienen. Las imágenes son planas, aislan formas, cuerpos, del entorno. Aportan y suprimen datos. Son un "punto de vista", es decir una vista subjetiva, o parcial. Son construcciones al igual que los textos. La imagen parece acercarnos a lo acontecido, cuando es posible que nos aleje o nos lo disponga de un modo particular, o  nos disponga de modo que nuestra vista sea una construcción.

Es cierto, sin embargo, que la imagen plástica parece acercarse a lo que muestra. Una realidad de que muestra solo fragmentos, que detiene, fija y aplana la realidad.
La capacidad de la imagen plástica de dar la sensación que suple la realidad -que nos la acerca, que nos la pone delante, sin filtros, artificios, composiciones o construcciones- ha sido discutida desde siempre, y ha llevado a la condena o a la exaltación de la imagen. El catolicismo defendía la imagen realista" por su capacidad de ponernos ante el dolor de Cristo en la cruz, a fin que nos sintamos culpables de lo que vemos -la estatuaria barroca acerca la mirada vidriosa de Cristo moribundo-, olvidando, por tanto, la esquematización, alteración, recreación o fabulación de la realidad, por parte de la imagen, mientras que el protestantismo o una parte del islam, y el judaísmo, insistir en el carácter ficticio de la imagen plástica -pero no de la palabra escrita que, en el Islam, se considera traduce o refleja la palabra divina- que impide tener una "imagen certera" de la divinidad, una imagen que altera el verdadero rostro de lo que muestra.

La imagen, escrita o plástica, es siempre una construcción que acerca y aleja, que nos coloca en un punto de vista que no es el del testigo, dado que el testigo barre con su mirada lo que acontece, y no enfoca -porque no puede enfocar, porque nuestra mirada no puede recortar, aislar un hecho del entorno. La imagen no es la realidad.
Sin embargo, tanto quienes tomamos imágenes plásticas como quienes las condenamos, creemos, sin duda de "buena fe", que la imagen nos pone ante lo que no queremos ver o no tenemos que ver, como si la imagen fuera un "punto de vista moral".
Ahí reside la fuerza o el peligro de la imagen plástica. inevitablemente nos hace creen en lo que no es. Nos hace creer que sustituye a la realidad y, por tanto, recibe consideraciones que solo la realidad merece.
Pero no mostraremos imágenes plásticas, sin embargo. Su poder fabulador sobrecoge.    

2 comentarios:

  1. Ni la imagen física directa ni la escritura son la realidad. La realidad siempre es subjetiva, yo creo, pues tiene que ser traducida por cada bicho viviente, sea para el placer o para el dolor. Cuando nos afecta algo es la realidad plena. Naturalmente, eso puede ser compartido, como suma de individualidades afectadas. Al fin y al cabo, ¿de qué hablamos cuando hablamos de la realidad objetiva y distante? A partir de ahí podríamos establecer muchos debates sobre las manipulaciones ad hoc de lo transmitido por imágenes o por la literatura, oral o escrita. Gracias.

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    1. Muchas gracias por su comentario.
      Intenté responder en este espacio. La respuesta superada el número de caracteres autorizados. La respuesta o el comentario aparece pues en la siguiente entrada del blog. Espero no haberle molestado respondiendo de este modo.
      Un atento saludo

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